jueves, 1 de marzo de 2018

De los Vatos y otros Demonios (Solo te quiero para Coger)


Es curioso, como siempre llegan a mí, historias de desosiego, creo que tengo oído de escritor, es una capacidad innata (heredada de mis abuelos) que permite a las personas abrir su corazón con este extraño, que en un abrir y cerrar de ojos se puede transmutar al espejo de su maestro interno, un hermano, o simplemente un tímpano. Encontré estadísticamente, siendo yo parte de la misma cifra oscura: EL TORMENTO EN EL ROMANCE, viene de la mano del genero que me toco en esta vida. A su vez sé que he sido mujer tantas veces, pero cada que regreso envestido en fuerza fálica es inevitable lacerar mujeres los primeros años de mi existencia. No victimizo a ellas, pero deduzco que hay algo su ser que las vulnera al abrir el corazón, cuando eso sucede, no siempre, pero generalmente en la contra parte surge la anti naturaleza, porque una parte de mi me dice que no es natural subyugar el amor bajo ninguna circunstancia, es anti natural vincular el afecto a la sumisión. Para dejar de sufrir, mi respuesta siempre está relacionada a una filosofía que apenas alcanzo a ver esbozos, simples destellos, pero es profundo el poder de la QABALAH, que a veces la punta del iceberg permite tocar el cielo. Es sencillo, para que el milagro suceda tiene que operar la alquimia primaria, la más elemental, la que sucede en el corazón, la formula y el ritual tiene como elemento principal: el amor y la transmutación en la conciencia-  se pensaba en la antigüedad que los alquimistas convertían metales en oro, lo cual ni se admite ni se niega sino todo lo contrario, la realidad es que los grandes misterios de la humanidad son simbólicos. De lo que se trataba era de transmutar las emociones (entre otras cosas) de tal forma cuando ocurre la tragedia, cuando el corazón está roto o humillado, la respuesta es amar ese drama, e identificar el suceso promoviendo en uno o en una misma, que nunca vuelva a suceder. Cuando alguien te lastime, si, aléjate, pero permite que el canal para trascender ese sufrimiento, sea el perdón y el amor, aquel aquella que lo hizo ha pasado a formar parte de una larga lista de maestros, que nos enseñan eso que jamás debemos permitir, se identifican los rasgos y cuando vuelven a presentarse, al menos la decisión ya es consiente y el dolor es opcional. Pero si es necesario, amar esa causa, para que el efecto, sea inversamente proporcional a la tragedia. Claro está, las respuestas y los antídotos no se hallan en la superficialidad, de un artículo de un blog de internet, o si (rara vez). Está en los libros, pero al menos, si alguno alguna de ustedes, querido lector lectora, se allá con mis palabras, esta sabiduría judía, funciona para equilibrar la energía y tiene resultados tangibles en el cotidiano, y resultados poderosos en la espiritualidad. Cada quien decide en lo que cree, lo cierto es que algunos pensamientos tienen mucha más fuerza que las palabras. Busquen, y hallaran, si les intereso el tema, busquen a un escritor de nombre Yehuda Berg; es un autor muy sencillo y fácil de entender, finalizo este texto, citando algunos de los principios que el menciona en uno de sus libros y se relaciona con todo lo leído líneas arriba.
1.- DUDA DE TODO CUANTO DIGO: VE Y COMPRUEBALO
2.- Nunca – y eso significa nunca – culpes a otras personas o sucesos externos.
9.- Los obstáculos son nuestra oportunidad de conectar con la Luz.
10.- Cuanto mayor sea el obstáculo, mayor es la Luz potencial.
11.-Cuando los desafíos parecen abrumadores, inyecta certeza. La Luz siempre está ahí.
12.-Todos los rasgos negativos que detectas en los demás son un mero reflejo de tus propios rasgos negativos. Sólo si cambias tú mismo podrás ver el cambio en los demás.
13.- Ama a tu prójimo como a ti mismo. Todo lo demás es mero comentario. Ahora ve y aprende.

Ojalá le sirva a quien le tenga que servir. Buen día. “LOS Y LAS QUE TENGAN OJOS, QUE VEAN”
Daniel H. Soto.